Edge Entertaiment publicará Los impostores, la nueva edición del juego diseñado por Bill Eberle, Edward Horn, Jack Kittredge y Peter Olotka en 1981. Esta segunda edición contará con un arte gráfico totalmente renovado, así como un cambio de ambientación, pasando de una corte medieval a los herederos de una rica familia moderna.
Los impostores es un juego de personajes ocultos, faroleo y deducción en el que de 3 a 6 personajes intentan hacerse con la fortuna de la familia Vargas. El objetivo del juego es eliminar al resto de los aspirantes a herederos descubriendo sus mentiras, aunque si vuestras acusaciones no tienen fundamento, quedareis eliminados de la partida. Los jugadores deberán de conseguir recursos para investigar a sus rivales, evitar las acusaciones y no desvelar vuestras mentiras.
Los impostores, nada es lo que parece
Los jugadores inician la partida con una identidad secreta, y una pequeña cantidad de dinero, pruebas o prestigio; esto lo usaremos para desenmascarar a nuestros rivales, aunque a través del engaño, deberemos de conseguir más. Cada personaje tiene una habilidad que le permite elegir estos valiosos recursos, así que deberemos adoptar las personalidades de los distintos roles para derrotar a nuestros adversarios. Sin embargo, cualquier jugador puede desafiar nuestro papel, momento en el que los jugadores votarán y decidirán si nos creen o no.
Durante la partida, los jugadores podrán usar los recursos para acusar formalmente a un rival, que deberá responder con cuatro cartas de sospecha entre las que se incluye su identidad verdadera. El jugador podrá acusar a su rival, pero si se equivoca, se verá fuera de la partida.
Los impostores es un juego rápido, muy parecido a Coup, da un pasito más al necesitar un proceso más elaborado para descubrir la identidad de cada uno, además de aumentar la interacción entre los personajes. La combinación de marcadores y los personajes lo hacen muy rejugable y su precio, 13 euros, lo convierten en un título muy atractivo. Edge Entertaiment lo lanzará próximamente a la venta.
