Segundo vídeo dedicado a Tigris y Éufrates de la editorial Devir. En esta ocasión os vamos a mostrar con qué elementos se comienza una partida, las acciones que podemos realizar durante nuestro turno y la resolución de conflictos.
Tal y como os prometimos en el anterior vídeo, dedicado a esta maravilla de juego (aquí), en el siguiente vídeotutorial de Tigris y Éufrates os explicamos los componentes con los que empezará cada jugador al comienzo de una partida, las cuatro acciones que podremos llevar a cabo durante la misma, cuando seamos el Jugador Activo, la resolución de los llamados Conflictos Internos y Externos, cómo se construyen los Monumentos y la inclusión de los Edificios Especiales para una partida de nivel más avanzado.
Si recordáis, una de las cosas que dijimos sobre este juego, es que Tigris y Éufrates es un juego al que podríamos meter dentro del género o categoría eurogame/ abstracto, siendo esto último lo que más destaca durante sus partidas, sobre todo en la manera que tiene de puntuar al ganador.
Su aclamado autor, el alemán Reiner Knizia, suele caracterizarse por implementar cierto componente matemático a la mayoría de sus juegos, destacando en este Tigris y Éufrates, a la hora de hacer el computo total de puntos para ver quién es el vencedor de la partida. Lo normal en la mayoría de juegos a los que estamos acostumbrados, es que el ganador de cualquier juego sea aquel jugador que haya conseguido más puntos sobre el resto de sus contrincantes. Pues bien, en Tigris y Éufrates no es así, donde Knizia nos propone una nueva manera saber quién ha sido el vencedor, siendo, quizás, una de las cosas que más chocan o llaman la atención la primera vez que lo juegas.
Pero quizás, esa manera de puntuación sea el autentico meollo del juego, ya que tendremos que estar pendientes a lo largo de la partida de intentar puntuar en los cuatro campos diferentes (agricultura, religión, mercado y población) por lo que no valdrá centrarnos en uno solo y dejar de lado al resto.
Recordemos que en esta edición de Tigris y Éufrates de Devir, también se han incluido los cuatro Edificios Especiales para hacer nuestras partidas más intensas, ya que la colocación de los mismos supone un flujo constante de puntos al final del turno y un motivo más que justificado para entablar Conflictos Internos/Externos con nuestros «vecinos». El uso de estos Edificios Especiales, al igual que el uso del tablero avanzado con el borde verde, personalmente lo aconsejo para jugadores con cierta experiencia y conocimiento más profundo del juego, ya que al principio nos puede costar un poco más aprender sus mecánicas con tanto Templo (habrá más hostilidades entre los jugadores) y estar al tanto del cobro de puntos que nos otorgan los Edificios.
La curva de aprendizaje de Tigris y Éufrates «suele» ser algo prolongada, y lo pongo entrecomillado, porque no suele ser un juego al uso. Siempre que me toca explicarlo a alguien nuevo me gusta compararlo con el Ajedrez, ya que creo que tiene, o se le puede sacar, cierta similitud (referencia matemática). Podemos aprender los movimientos de los Peones, el Alfil, el Caballo, las diferencias de valor entre la Torre y la Reina etc… pero usar y mover correctamente todas estas piezas en conjunto, para disfrutar de una buena partida de Ajedrez, sólo se logra con el tiempo, y/o la lectura de algún(os) libro(s) o incluso asistiendo a clases de Ajedrez. Bien, Tigris y Éufrates no llega a esos extremos, pero si comparte cierto grado de aprendizaje que sólo jugando partidas y partidas lograremos sacarle el máximo rendimiento a este formidable juego.
En el próximo vídeo os mostraremos una partida a Tigris y Éufrates. A continuación, os dejamos con el vídeo.
